Antes de seguir leyendo, detente un momento y haz memoria y cita los cuentos o retazos de películas que te han contado y que mas recuerdas en los últimos 14 años de la vida política del país. Aquellos cuentos que escuchaste tal vez en kilométricas cadenas de radio y TV que ofrecía el difunto presidente, y los que intentan contar sin éxito los que dirigen el país en la actualidad incluyendo a Nicolás Maduro.
De todos esos cuentos que ya parecen más bien una película, el que más se repite es el del Magnicidio. Por más de una década pretendieron (según ellos) asesinar al presidente, y después de muerto por circunstancias naturales, aparecen ahora nuevos personales de esta historieta y como un cuento repetido intentan sembrar entre el pueblo una especie de lastima, compasión y a la vez odio por quienes pretenden cometer el abominable hecho que es dirigida siempre por la oposición
Lo que coincide en cada una de las historias contadas, es que el libretista ve que el Plan de magnicidio siempre aparece cuando el gobierno está atravesando una crisis política fuerte, que complica la situación y va palo abajo, y es el momento de desviar la atención, según las recomendaciones cubanas a través del G2
Recordemos aquella bazuca o lanza cohete en tiempos de Hugo Chávez y que encontrada en un puesto de periódicos de revistas en los alrededores del aeropuerto de Maiquetía, que supuestamente era para lanzarlo al avión presidencial y nunca se dijo ni siquiera quien era el dueño del puesto de ventas de revistas. Otro día apareció el argumento del hechizo y se dijo que se habían encontrado en los jardines de La Casona animales muertos sin cabeza, que supuestamente era un “mal” para que hubiese un final fatídico
Así sucesivamente han aparecido muchos personales como el caso de Mario Isea cuando acusó a Manuel Rosales de estar detrás de un plan de esta naturaleza, o cuando Mario Silva dijo que militares activos estaban detrás de este plan conspirativo de acabar con el presidente, sin contar que han asomado presidentes deLatinoamérica y de EEUU de estar en complicidad para este fin como el caso de Álvaro Uribe y George Bush que fueron señalados en varias oportunidades.
Lo cierto del caso es, que como cuentos repetidos son ya fastidiosos y no despiertan en el colectivo ningún tipo de motivación, ni a favor ni en contra, pues como dijo mi abuela en una de sus sarcásticas salidas, “eso del magnicidio está como los discos de acetato de Rafael Muñoz, es decir rayaos”.
Ahora El “grande liga” del Psuv Diosdado Cabello dice también que no sólo a Maduro sino a el, los quieren matar y han señalado nombres como Luis Posada Carriles que acaricia los 90 años en los actuales momentos y no creo que tenga ánimo para levantar una bazuca ni coordine ninguna acción con claridad
Para cambiar la historieta por lo menos le recomiendo al libretista que busque un magnicida más joven que el que han asomado en este nuevo rodaje y copie al creador de la cinta el Hombre de Acero Supermán que periódicamente va cambiando la imagen de su personaje adaptándolo con el tiempo a las exigencias del público para mantener la atención o expectativa.
El fin de esta película no será por esta vía siniestra sino por vía de la ineficacia y la corrupción, que como ´cáncer terminal viene devorando por dentro a lo que han llamado revolución. Los cuentos que nos cuentan desde hace 14 años ya vienen repetidos, y el del magnicidio que es ya de bajo presupuesto no está llenando ni un cuarto de sala. “Me voy de la sala, ya esta película la vi”.
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